Buscando más datos sobre el restaurante Marmitaco de Vitoria, de Jose Antonio Merino, que aparece en esta entrada hablando sobre la necesaria innovación en los restaurantes, la información que más se repetía en google era su premio a la mejor tapa de vanguardia en el concurso nacional de tapas de Valladolid: Una maceta en la que sólo se ve tierra, pero que al regarla con un caldito de tomate empiezan a brotar de ella las verduras.
Me picó la curiosidad, y busqué y rebusqué por internet algún vídeo de este truco de magia gastronómica. No encontré ninguno en que aparezca la tapa del Marmitaco sóla. Encontré algo mejor: Un documental de la etb del programa Objetivo Euskadi, en el que aparecen muy buenos restaurantes del País Vasco enseñando sus tapas con más espectáculo.
Darren Williamson del Bar Bitoque, muestra el Maxibon de Rabo de Toro con sopa de asados. Paul Ibarra y Fernando Canales del Restaurante Etxanobe dan a conocer distintas aportaciones creativas de su restaurante, como el ajo negro, las medusas comestibles, plantas que saben a ostras o eléctricas.
Iñaki Rodaballo, cocinero del Mesón Pirineo ha creado un plato llamado Lechugas en la niebla inspirado en una sensación experimentada en la huerta navarra con la niebla matutina que lleva al plato. Aparecen creaciones del laboratorio Arzak. Y Floración de Marmitaco, que incluye el efecto visual de crecimiento de unas plantas comestibles en un minimacetero. Que lo disfrutéis.
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