VIAJAR EN MIKROKOPTER

El tema de los Mikrocopter (pequeños helicópteros de aeromodelismo) es la bomba. De gran estabilidad al llevar varias hélices que nivelan el aparato (cuatro, seis u ocho), cuando se incorpora en ellos una cámara pueden sacarse imágenes bestiales. Pero hay más. Porque las imágenes se pueden reenviar a unas gafas o a una pantalla tft en tiempo real. Uno se puede imaginar la sensación al ver los vídeos grabados abajo. El primero está hecho con un octocóptero (8 giróscopos) y con él paseamos por la playa de Bastiagueiro en A Coruña. El segundo es de un vuelo audaz por los Alpes sin despeinarse: te deja sin palabras.

Desde luego controlar un bicho de estos no se puede aprender de un día para otro. Y tampoco es que sólo sirvan para ver partidos de fútbol gratis. En muchos documentales o películas con planos cenitales se usa para abaratar costes al ser una tecnología barata en comparación con andar a dar vueltas en avioneta. Encasquetarse unas gafas y sobrevolar con un Mikrocopter espacios naturales o sobrevolar catedrales debe ser una pasada. Se abre una nueva posibilidad de acercarse a los destinos, sentirlos y disfrutarlos.

Oktokopter HD-3 from albertocvr on Vimeo.


TRISQUEL EN PONTEVEDRA CIUDAD

Una recomendación de tapeo para Pontevedra descubierto por Bea (gracias Bea!): Trisquel en la rúa Nova de Abaixo nº 14 cerca de la Alameda. Taberna de ambiente cercano, pequeña, con una lista de platos que se exponen a diario en la pizarra, y que se suelen ir renovando sin renunciar a los clásicos que más gustan. La cocinera, chilena (aunque quién lo diría por lo bien que habla el gallego) experimenta y ofrece recetas propias. El plan no es comer productos típicos de algún sitio, y aunque nos podemos encontrar con los nachos mejicanos, todo lo que se hace tiene un toque personal y familiar.

Lo que yo prové y estaba delicioso fue la ensalada chilena compuesta de aguacate, tomate natural muy picado y muy sabroso, cebolla pochada y trozos de gambas; las chalupitas, que son arepas -torta de masa de maíz- cubiertas con pechuga de pollo muy troceada y un huevo frito, y de postre unos helados caseros quenindiola. Estos helados son un tema aparte. Pude probar el de ciruela, manzana, y uno de higos sensacional. El secreto del sabor de su comida nos dicen que es por usar productos de una huerta propia, y me lo creo, sobre todo en esta última parte por lo logrado de los sabores de los helados. Normal en los precios.

Ofrecen también cerveza Gallaecia de la que previamente había leído algo en Colineta sobre el misterio de su procedencia. La pruebo por primera vez aquí. La negra. Me gusta. De amargor suave y algo dulce. Gallaecia ha entrado en el mercado con un bonito diseño y apelando al espíritu celta con seis variedades, pero que sea gallega ya es un tema que puede discutirse.

VIAJAR FIJÁNDOSE EN LOS MOMENTOS MÍNIMOS II

Ya publicara una entrada sobre Joan Jimenez y su conocido vídeo sobre Japón. Me fascina este tipo. Es un cazador de grandes momentos mínimos. Qué forma de ver las ciudades!! Construyendo un viaje a golpe de pequeños detalles, imágenes que pasarían desapercibidas si él no intuyera su capacidad de emocionarnos. Excelente sensibilidad en un vídeo esta vez de un Estocolmo azul azul.



http://turismodepontevedra.blogspot.com/2010/09/viajar-fijandose-en-los-momentos.html