Este verano no hubo tanto turista donde sumar. Faltan por sacar las estadísticas de agosto, pero a la espera de lo que pueda salir del Instituto Nacional de Estadística para ese mes, en la foto fija de la situación económica de julio de este año (con respecto a julio del pasado año), la hostelería de Pontevedra sale sacudida como un saco de boxeo, aunque logra mantenerse en pie.
La crisis se veía venir de lejos, en enero el Patronato de Turismo ya hablaba de ella, pero creo que a las administraciones públicas el desacelerón las ha cogido con una dinámica de trabajo heredada de tiempos mejores y no han sabido adaptarse a las circunstancias. Representantes del sector privado tampoco han querido llevar a cabo un análisis realista de la situación y en ocasiones, se han dejado llevar por el tremendismo con la pérdida de credibilidad que eso supone, llegando a cifrar para el verano un descenso de ingresos en hoteles entre el 40% y el 50%, con una ocupación hotelera hasta un 25% inferior a la del año pasado.
Con la oposición y el sector reuniéndose para charlar de crisis, la Dirección Xeral de Turismo aventuró el 7 de Agosto unas estadísticas apresuradas para Julio: los viajeros en Galicia parecían ser un 1,41% más, y las pernoctaciones ascendían a 971.139 (485.559 en Pontevedra). Unas cifras que se diferencian lo suficiente a las de ese mismo mes del INE, como para que si nos creemos unas (las de la Xunta) podramos hablar de subidas, y viendo las otras (las nacionales) hablaremos de bajadas en todas las variables: 33.900 viajeros menos en Galicia y un descenso de 1.002.555 a 957.409 pernoctaciones (con un bajón en Pontevedra que pasa de 455.540 a 422.622). En otros muchos datos la tendencia tampoco varía: Los ingresos en Galicia bajan un 1,2% mientras suben en el Estado una media de 3,1%, y a pesar de que los precios bajan en julio medio punto con respecto al año pasado, la ocupación en la provincia baja un 4%. Ver notas de prensa aquí y aquí.
La sensación global del verano, parece coincidir con este resumen de Julio del INE, ligeramente amortiguado por los números que se esperan de Agosto: Descenso importante de pernoctaciones con una contención en el gasto de los turistas, y una pérdida de ingresos soportable, pero con fuertes incertidumbres de cara al futuro, dificultad en el acceso a créditos, y una previsión de ventas en continuo descenso que no se conseguirá frenar hasta principios del 2010 con la llegada del año xacobeo.
Lo que va de 2008 no fue tan malo. Pero restan unos meses complicados y un próximo año muy difícil, si no se empieza a trabajar desde ahora en planes que amortiguen las previsiones y el pesimismo.
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