Lo comentamos en otra entrada, y prometimos poner un ejemplo. Es este.
En los locales de menos de 100 m2 donde se permite fumar (hablamos de restaurantes, cafeterías y bares), los menores de 16 años pueden entrar sin ningún tipo de problema (aunque no vayan con sus padres). Es la ley del tabaco.
Y esto funcionará así hasta que el propietario del local no haga uso del derecho de admisión. Basta con situar un rótulo a la entrada, señalando que el local es de fumadores y que los menores de 16 no pueden entrar, para que la Administración entienda que en este caso el uso del derecho de admisión está justificado.
Resumen: En un restaurante, cafetería o bar de menos de 100 m2 en el que se permita fumar, pueden entrar menores de 16 años incluso sin la compañía de sus padres, excepto cuando se coloque un cartel en los accesos al establecimiento prohibiendo su entrada, refiriendo dicha prohibición a la protección de la salud, por tratarse precisamente de un local con humo.
Un resumen alternativo: La salud de los menores se ve perjudicada en los locales de menos de 100 m2 donde se fume, sólo cuando el propietario del establecimiento lo entienda de ese modo, dejando en bastante mal lugar a la Administración, que permite razonablemente en estos casos el uso del derecho de admisión a petición del hostelero, llamando la atención al actuar así, sobre las contrariedades de la legislación del tabaco.
¿por qué los mismos argumentos que permiten usar el derecho de admisión para este caso (es decir, daño a la salud del menor), no permiten también una prohibición generalizada de la entrada de menores en los locales con humo?. ¿Padece más un menor en un local con derecho de admisión que en otro donde no cuelguen el letrero y se fume igual?.
Seguramente pocos hosteleros utilicen ésta fórmula porque les resta clientela, pero es una vuelta de tuerca bastante curiosa a la Ley del Tabaco, y que deja ver su flanco más débil.
Y ahora el nombre del establecimiento para fumadores que prohibe la entrada a menores: Café del Mundo en Pontevedra, un café bar de decoración cuidada, sillones cómodos y coctelería de café. Está muy cerca de la estación del tren. Exactamente aquí: Camiño de ferro nº 4. Un par de fotos por dentro pinchando aquí.
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